La presencia digital de una compañía es en la actualidad una de las mayores inquietudes de los empresarios, ya que los canales digitales son la principal forma en sus consumidores los contactan, por donde se ofrece la atención al cliente y en algunos casos donde se ofrecen los productos a la venta; pero el mantenimiento y actualización de los mismos suele verse como un “gasto” que no siempre genera retorno.
Hay muchas organizaciones que aún hoy, -sí en 2018, después de más de 20 años del surgimiento de la Internet para uso comercial- no tienen como prioridad los canales digitales de su compañía.
Si bien las plataformas digitales poseen distintos usos y generan diferentes resultados, dependiendo de la industria podemos decir que, como primer paso, una buena presencia en canales digitales ayudará a nuestro posicionamiento de marca, permitiendo a los usuarios conocer mejor lo que hacemos, tener claro lo que vendemos y sobre todo, a establecer un mejor y más fácil contacto con la empresa, en caso de necesitar nuestros productos o servicios. Es en este último punto donde tenemos que aprovechar las herramientas digitales y no dejar pasar el momento.
¿Qué aspectos tomar en cuenta para mejorar mi presencia digital?
1. Si no está en Internet, no existe.
La presencia digital genera en primer lugar posicionamiento de marca, esto implica mucho más que “aparecer” en los resultados de búsquedas o posicionamiento web. La forma en la que su marca se comporta digitalmente y cómo se dirige a sus clientes es fundamental. ¿Es su marca empática con su público? ¿Ofrece a sus consumidores buenas experiencias digitales? ¿Qué tal la atención en línea? No basta con “estar” en los canales digitales, esta presencia debe reflejar profesionalismo, mostrar conocimiento y expertise. Si desea construir un mundo de marca en el que los consumidores la recuerden, tengan una buena opinión de ella y deseen interactuar, hay que saber elegir muy bien en qué canales tener presencia y de qué forma hablar con su público.
2. Ampliando sus fronteras.
Si su empresa dejó de ser una empresa pequeña o una empresa familiar o local de productos o servicios, debe dar ese paso a lo digital. No es lo mismo querer vender un producto o servicio en un barrio a ofrecerlos en un contexto regional. La presencia en Internet abre las posibilidades a muchos más negocios y potencia la oferta de su empresa más allá de lo que imagina. Podría sorprenderle la cantidad de empresas que encuentran su mercado principal fuera del país donde se originó la compañía, gracias a Internet.
3. La tecnología debe tener fuertes bases digitales.
Si su empresa u organización se dedica a servicios o productos tecnológicos, no debería estar utilizando solo canales analgógicos para contactar a sus clientes. ¿Se quedó con los anuncios en periódicos o revistas? ¿Si usted fuera un cliente de su compañía, cómo le gustaría que le contactaran? Las plataformas y herramientas digitales que utilice deben estar sumamente actualizadas y denotar la cultura tecnológica de su organización, de lo contrario se podrían ver obsoletos y no ser congruentes con la tecnología que ofrecen.
4. Ir más allá de la información.
La primera impresión que tengan los consumidores sobre su marca es primordial y muchas veces esta se da por medios digitales. Pero un sitio web o una plataforma digital debe de ser vista como algo más que un repositorio de datos o información. Son herramientas sumamente útiles que nos dan feedback sobre nuestro público, cómo está conformado y cómo se comporta digitalmente.
5. Nuevas generaciones.
Hay que pensar que nuestro público es renovable, tal vez nuestros actuales consumidores no sean “tan digitales” sin embargo en unos 5 años el cambio generacional será súbito y podría estar tarde para alcanzar el camino que lleva recorrido la competencia. Además a través de los años se han podido observar cambios significativos en los hábitos del consumidor, donde cada vez salen menos a comprar y hacen más transacciones en línea, adquiriendo productos o servicios online. La industria bancaria es un claro ejemplo de esto. ¿Cuándo fue la última vez que hizo fila en un banco para pagar un recibo de agua o teléfono?
6. La opinión de sus clientes cuenta.
Por último y no menos importante, la relevancia que tienen los reviews y calificaciones tanto para productos como servicios hacen que la presencia digital sea vital para muchas compañías, ya que permiten saber si están haciendo un buen trabajo o si hay cosas por mejorar. La credibilidad que puede conceder una opinión favorable por parte de clientes reales, hace que otros clientes se aventuren a probar un producto o contratar un servicio. Podríamos decir que los “casos de éxito” hoy en día se construyen solos, mediante el feedback que nos dejan, muchas veces en vivo, nuestros propios clientes.
Si su empresa se encuentra en una etapa que coincide con 4 o más de los elementos arriba señalados y no tiene redes sociales activas o sitio web, es hora de tomar acción y plantearse una nueva estrategia de canales digitales.
Solicite aquí SIN COSTO, un diagnóstico de sus canales digitales